Ex gobernadores…La clave en mensajes
La caída de Roberto Borge, ex gobernador de Quintana Roo y la caída del ex Secretario de Salud de Oaxaca un día antes de la elección celebrada el pasado domingo, encierra la clave del mensaje que sin lugar a dudas se le manda a varios ex gobernadores con un futuro incierto.
A estos dos casos hay que agregar dos más. Ayer el empresario Sonorense Mario Aguirre vinculado a los mismos delitos por los cuales está en la cárcel el ex gobernador Guillermo Padrés se entregó a la PGR para enfrentar los delitos que se le imputan.
A Mario Aguirre se le vincula con hechos que supuestamente son constitutivos de delitos, sobre todo relacionados con el mal uso de recursos del programa de uniformes escolares.
Pero ayer mismo, un juez federal les negó un amparo promovido por todos los hermanos del ex gobernador de Sonora Guillermo Padrés en su intento de rescatar el Rancho Pozo Nuevo embargado actualmente por autoridades federales.
Si a esto se le agrega el fuerte interés mostrado por el gobierno de Peña de extraditar a Javier Duarte y al propio Roberto Borges en un plazo que no pase más allá de los 6 meses, entonces la clave y el mensaje, se encuentra en la urgencia por aplicar la ley que no es de a gratis ni por el renacimiento de un espíritu de legalidad.
La verdad visible es que el gobierno de Peña que quiere entregarle la presidencia a un priísta, pareciera que ya entendió y aprendió a leer los estudios de opinión sobre todo en el rubro comúnmente denominado Factor Cambio que no es otra cosa más que el deseo del cambio de la gente.
1.-Cuando se revisaban los estudios de opinión que indicaban las tendencias del voto y del sentir de la gente en los estados donde habría elecciones el pasado domingo, había un apartado que preocupaba a la gente del CEN del PRI y de la presidencia de la república. El Factor Cambio.
2.-Este factor como se le llama ahora, no es otra cosa más que el deseo de cambio de la gente. En pocas palabras, en la mayoría de los casos, la gente no está conforme con los gobiernos que tiene y desea un cambio.
3.-En el Estado de México que era el Estado que realmente preocupaba y ocupaba al grupo en el poder presidencial, el factor cambio andaba por las nubes. El 67 por ciento de la gente decía que era necesario un cambio en la forma de gobernar y en algunos temas el factor cambio era hasta del 92 por ciento según algunos estudios consultados y difundidos.
4.-Ese factor cambio, puede ser la clave para tratar de entender si la aprehensión del ex gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge -un día antes de la elección-, fue pura casualidad o fue una acción gubernamental obligada a tomarla para responder a ese deseo de cambio de la gente.
5.-Lo que sí está claro, es que el gobierno federal ya entendió que hay un fuerte descontento social por los numerosos actos de corrupción en los cuales se ven inmersos sus gobernantes y ahora reclama castigo para estos, mientras que el gobierno federal pareciera estar dispuesto a escucharlos e ir a la caza de los corruptos.
6.-Es quizá por eso que no solo se apure la extradición de Javier Duarte, se trabaje en traer también a México a Roberto Borge y de paso se conozca el fallo de un juez federal que le niega el amparo a los hermanos de Guillermo Padres o finalmente Mario Aguirre decida entregarse.
7.-Estos cuatro casos, más la detención del ex Secretario de Salud de Oaxaca, un estado gobernado por un Aliancista, obligan a visualizar que el gobierno federal tiene muy claro que si quiere conservar la presidencia primero tiene que atender el factor cambio de la sociedad que reclama castigo para sus gobernantes corruptos.
8.-Y si esto es así, entonces bien valdría ir revisando la lista de ex gobernadores que quedan pendientes de resolver si son sometidos ante la justicia o se les declara libres de todo pecado y culpa. En este apartado, los errores políticos cometidos pueden resultar muy caros.
9.-Lo que si es cierto es que de aquí a inicios del próximo año, ningún exgobernador puede pensar que ya la libró y menos cuando los gobernadores en turno que tendrán elecciones locales el próximo año ya leyeron el mensaje de donde está la clave para ganar en sus respectivos Estados. La clave está en el factor cambio y el cambio está en el castigo a los corruptos.
No hay de otra.
Eso sí, sin ser adivino, aún faltan varios por caer.
O caen los ex gobernadores vinculados a actos de corrupción, o caen los gobernadores actuales por cómplices de estos. Pero de que caen varios más, caen.
No hay vuelta de hoja.
Así sin quitarle ni ponerle
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-En el PRI hay una decisión que no ha sido tomada aun. Habrá reelección o no de diputados locales y alcaldes.
Hasta donde se dice, en el Comité Ejecutivo Nacional del PRI aún se deshoja la margarita para decidir si se permite la reelección o no.
Hay una postura en el sentido de no poner en riesgo la elección presidencial y no permitir la reelección y mucho menos que ésta pueda ser selectiva. Es decir, unos sí y otros no.
La otra posibilidad que se debate es que estas mismas posturas no se asuman de manera general y nacional, sino dejar a los estados que evalúen y tomen la decisión según sus respectivos escenarios.
Lo que si es cierto, es que esta falta de definición provoca que la calentura política empiece a subir de grados ante el interés de los diferentes cuadros y supremos aspirantes que se queman por llegar a las alcaldías o a las cámaras locales.
En el caso de Sinaloa la voz de arranque, pareciera que no fue esperada ni respetada, y los supremos aspirantes arrancaron por su cuenta.
Tan solo en el municipio de Ahome, el diputado federal Bernardino Antelo ya se arrancó por la candidatura a la alcaldía.
El diputado local Marcos Osuna aspira a la diputación federal.
El propio alcalde Alvaro Ruelas quiere la reelección, al igual que la diputada local Fernanda Rivera aspira a desbancarlo de la silla que ostenta.
Pero estos no son todos. Mario Zamora aspira a la Senaduría y el fin de semana se arrancó Gerardo Vargas también por la Senaduría.
Pero la calentura no solo se experimenta en Ahome sino se vive ya en todos los municipios, pues quienes están en el poder, quieren reelegirse y quienes desean que haya cambios, se mueven para estar en condiciones de poder participar.
Así, a apenas a cinco meses del nuevo gobierno estatal, la fiebre política ya invade Sinaloa, no solo por las posiciones que estarán en disputa en el 2018, sino incluso, ya hay quienes proyectan desde este momento sus jugadas para el 2021.
Sin lugar a dudas, algo nunca visto.